La primera parte me gustó, sin ser espectacular. Esta secuela me ha encantado porque supera a su predecesora en todos los sentidos.
Dejando de lado la franquicia y concentrándonos en ésta película podemos decir que Guy Ritchie se apunta un nuevo logro. El director se ha manejado con una destreza magnífica para brindar una trama a manera de enredadera -que de por sí es la esencia de Sherlock Holmes detective-, sin enredarte. Época antigua, Europa, detectives, fuerzas bélicas, gitanos, bodas y funerales es lo que adorna a dos de las mas grandes mentes de occidente, (como es típico) una buena y otra mala.
El prestigioso profesor James Moriarty tiene un malvado plan escondido contra el que tendrá que luchar el mejor detective inglés, Sherlock Holmes. Una vez más asistido por su buen amigo, el Dr Watson y unos cuantos aliados improvisados entre los que destaca quien sería mas inteligente que el mismo Holmes, su hermano Mycroft.
El conflicto está sobre la mesa, Holmes tiene a su cargo el caso mas complicado de su vida ya que su oponente es tan o más (?) astuto que él. La historia se nos cuenta sin tantas complicaciones, lo que habla bien del guión y el director por sus dotes de narrativa. Todo el argumento es altamente entretenido y a eso se le suma las grandes actuaciones de Robert Downey Jr. y Jude Law, quienes nos siguen sorprendiendo por su capacidad de reinventarse a estos dos célebres personajes de la literatura, Sherlock Holmes y John H. Watson, mención para el primero que cautiva con esa personalidad polarizada entre lo que siente y lo que demuestra. El resto del elenco, nada mal por decir lo menos. Jared Harris estuvo a la altura del compromiso para interpretar al mayor enemigo de Holmes, Naomi Rapace como una aguerrida gitana, Stephen Fry como el hermano mayor del protagonista y una Rachel McAdams en un papel mucho menos notorio que en la primera película. No puedo olvidar las relaciones existentes entre personaje y personaje, se divertirán con lo mucho que quiere Holmes a la prometida de Watson.
Lo que hizo el director Guy Ritchie al mostrar ciertas tomas explosivas con tanta maestría técnica es totalmente aplaudible.
Dinámica, vivaz, divertida y muy inquietante son los epítetos que puedo otorgarle a esta película que me mantuvo atento durante toda la función. Si no la han visto aún están perdiéndose de casi dos horas de buen entretenimiento.
Recomendación: Vayan al baño antes o después de la proyección, No besos largos, No hablar por celular; cualquier distracción podría ocasionar que no resuelvan el caso.
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